BIZCOCHO DE CHOCOLATE Y CERVEZA NEGRA

o como tropezar y tirar un bizcocho al suelo.

o, como aunque sea la segunda vez que te pasa, te lo quedas mirando y arrancas a reír a carcajadas.
Sí, esto es verídico, y gracias a dios no estaba embarazada y llena de hormonas hasta las cejas porque sino en vez de reír me habría dado un hartón de llorar.
Uff, es que embarazada no me puedo controlar... y lloro. Como cuando llevé a Daniela al cine a ver la película de Campanilla, y al descubrir que las hermanas no podían estar juntas.... lloré. O con cualquier anuncio de la tele, sobre obras sociales... que también lloraba. Pero no, gracias a dios el día que tropecé por segunda vez y volqué el segundo bizcocho... estaba en plenas facultades... si es que se puede estar así.
Y vale, que el bizcocho lleve cerveza negra, pero es que parecía que me había tomado yo el resto del pack de las dichosas cervezas!!!

o, como finalmente, solucionas lo de tirar los bizcochos al suelo, pero ya es demasiado tarde para hornear otra vez y te presentas en casa de tu madre con una ensaimada rellena de nata comprada en la panadería de abajo de tu casa. Y lo del bizcocho de cerveza negra lo dejas para otro día, ainsssss.

RECETA DE BIZCOCHO DE CHOCOLATE Y CERVEZA NEGRA

INGREDIENTES:

• 250 ml. de cerveza negra
• 250 gr. de mantequilla
• 75 gr. cacao en polvo
• 400 gr. de azúcar
• 250 gr. de harina
• 2 cucharadas de bicarbonato
• 140 ml. de nata líquida 
• 2 huevos
• 1 cdta. de vainilla líquida

PREPARACIÓN:

- Calentamos en una olla la cerveza, antes de que llegue a hervir, añadimos la mantequilla cortada en trozos y removemos con unas varillas hasta que se deshaga la mantequilla. Retiramos el cazo del fuego y reservamos.

- En un bol grande mezclamos los huevos con la nata para montar y la vainilla líquida. Vertemos la mezcla anterior y batimos bien.

- A continuación, en otro bol, echamos la harina, el azúcar, el cacao y el bicarbonato, mezclamos con un tenedor hasta que se integren bien todos los ingredientes.

- Incorporamos esta mezcla seca en el bol donde tenemos la masa líquida, mezclamos con unas varillas hasta obtener una masa homogénea. No te asustes, te quedará una masa bastante líquida.

- Volcamos la masa en un molde que habremos engrasado previamente y lo metemos en el horno durante 50 minutos.

- Sacamos el bizcocho del horno, lo desmoldamos y lo dejamos enfriar

- Lo podemos degustar tal cual, pero relleno de un frosting de queso y nata (tienes la receta AQUÍ) está espectacular!!

NOTA: la decoración del bizcocho con el frosting debe parecerse a la cerveza con su espuma, no es que me haya vuelto tan dejada como para no estirar y pulir la decoración ;p

SALUD.